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Prohibido prohibir

Armando Salinas Torre

Excelsior

Eliminar o destruir es más fácil que construir.

La tauromaquia en México es una tradición que tiene raíces históricas de alrededor de 500 años. El debate sobre su regulación, incluso su probable eliminación, debiera ponderar tal situación.

La fiesta brava es una expresión auténtica de nuestra historia, producto de la fusión de culturas y con un sello propio, único e irrepetible que, a la vez, ha servido de inspiración a las llamadas bellas artes como la escultura, la literatura, la música, la pintura, la arquitectura, la danza, entre otras.

Cada país en donde se practica la tauromaquia le imprime unas cualidades particulares. Para muchos de nosotros la tauromaquia forma parte de una manifestación de mexicanidad, ya que conlleva valores y expresiones artísticas muy particulares.

El modo de vida y de asumir por los taurinos esta afición representa, en muchos casos, una tradición familiar que es heredada de padres a hijos y estos a sus hijos.

Al igual que muchos de esos mexicanos seguidores de la tauromaquia, desde pequeño tuve la dicha y el placer de acompañar a mi padre a las corridas de toros en las distintas plazas del país, por lo que es algo con lo que crecí y aprendí a disfrutar desde mi infancia.

Desde entonces me convencí de que la fiesta de los toros es una expresión popular donde convergen muchas emociones, entre ellas, el miedo, la admiración, el arte, la belleza, el valor, la duda, el entusiasmo, el éxito y por supuesto la vida y la muerte.

Es importante decir que existen en México centenares de miles de hectáreas destinadas a la crianza del toro de lidia, un animal que ha definido una raza y que es producto del esmero, cariño y cuidado de los ganaderos por muchos años. Solamente el 8% de los bovinos de lidia que nacen en una ganadería son lidiados en una plaza de toros. Es decir, más del 92% nacen, crecen, se reproducen y mueren de forma natural en el campo, que por cierto, son hábitats naturales de un sinfín de ecosistemas.

Es discutible el sufrimiento en la fiesta brava como una constante entre la vida y la muerte, pero ese deseo de acometerse, tanto del torero como del toro para citarse a crear belleza, es más poderoso que el sufrimiento del hombre o del animal, inclusive de la muerte de cualquiera de ambos.

La tauromaquia, al ser una expresión cultural y una tradición, por cierto, llena de rituales y hasta sincretismos, lejos de prohibirse debe de promoverse como una de las expresiones de nuestra mexicanidad. Además, es una fuente de empleos y una industria que genera economía para una parte considerable de la población.

La democracia no es sólo un gobierno de mayorías, sino en la que se gobierna mediante el diálogo respetando a todas las expresiones culturales.

Las manifestaciones en contra de las corridas de toros sólo han servido para mantener una bandera política simbólica que poco o nada tienen que ver con la verdadera protección de los seres vivos, no sólo de los animales, pero esa es una historia que se irá revelando por sí misma, esperando una lectura integral de los acontecimientos.

Respeto las divergencias de quienes piensan distinto y considero que la política no sólo es para ganar puestos de elección popular, sino para construir a partir de puntos de coincidencia. Se requiere oficio político para lograr construir una propuesta que deje satisfechos a todas las partes.

México SA

Autosuficiencia de petrolíferos en 2024 // Pemex: gasolineras, rapiña de privados // ¿Acabó la guerra fría? Rusia amenazada

Carlos Fernández-Vega

La Jornada

Con ocho refinerías en operación (seis existentes, más Dos Bocas y Deer Park), en 2024 México logrará la autosuficiencia en producción de gas y refinación de petrolíferos (especialmente gasolinas y diésel, algo no registrado desde hace tres décadas), con el multimillonario ahorro de divisas que ello implica y el consecuente fortalecimiento de la soberanía energética del país.

En la mañanera de ayer, la titular de la Secretaría de Energía, Rocío Nahle, y el director general de Petróleos Mexicanos, Octavio Romero, dieron a conocer lo anterior y detallaron que al inicio del nuevo gobierno el Sistema Nacional de Refinación a duras penas operaba a 32 por ciento de su capacidad; hoy estamos cerrando el año casi al 50 por ciento y para 2024 estaremos a 86 por ciento, con lo que estaremos cumpliendo el autoabastecimiento en México.

Decían los neoliberales que refinar en nuestro país no es negocio y por lo mismo se dedicaron a la importación masiva de petrolíferos. Pues bien, para dimensionar esa buena idea, sólo en el gobierno de Peña Nieto se importó gasolina por alrededor de 94 mil millones de dólares y diésel por 33 mil millones, montos que, obviamente, fueron a parar a los bolsillos de los consorcios foráneos para los que refinar siempre ha sido negocio y muy suculento.

De acuerdo con la estadística de Pemex, con Peña Nieto en Los Pinos se importaron petrolíferos y gas (licuado y natural seco) por 161 mil millones de billetes verdes, con el Borolas, 142 mil millones, y con Fox, 40 mil millones, en cada caso. Ya entrados en gastos, con Zedillo se erogaron 15 mil 600 millones y con Salinas (desde 1990) 7 mil millones. Entre este último y el copetón, el aumento fue de 2 mil 200 por ciento.

En esos cinco sexenios neoliberales se pagaron casi 366 mil millones de billetes verdes (más de 7 billones 300 mil millones de pesos al tipo de cambio actual) por el concepto referido. De ese tamaño resultó ser el no negocio pregonado por el régimen neoliberal, con un brutal crecimiento durante Fox, Calderón y EPN, amén de que todos olvidaron al Sistema Nacional de Refinación y aceleraron la pérdida de soberanía energética.

El presidente López Obrador dijo que la recuperación de Pemex se basa en 10 puntos básicos, con el propósito de cuidar el petróleo de la nación y utilizarlo “para consumo interno; que ya no se continúe vendiendo petróleo crudo y comprando gasolinas; que se mantengan precios justos por los combustibles; que no haya gasolinazos. Toda esta política está en marcha y ha implicado inversión desde el principio y un trato también especial a Pemex, porque antes se le quitaban todos sus ingresos; ahora puede operar”.

Octavio Romero detalló que en 2022 Pemex sólo exportará alrededor de 435 mil barrilles de crudo, pero ya en 2023 y 2024 prácticamente toda la producción se va a procesar, a refinar, porque va a entrar ya en operación la refinería de Dos Bocas y el proyecto de Cangrejera, que también va a refinar más de 100 mil barriles, de manera que prácticamente 100 por ciento del crudo mexicano se va a refinar en nuestro país para garantizar el abasto de combustibles.

Romero aportó un elemento muy interesante: las empresas privadas se apropiaron de las estaciones de servicio de Petróleos Mexicanos; pasamos de tener más de 12 mil a poco más de 7 mil hoy día. En la reforma energética se hablaba de que se duplicaría el número de estaciones de servicio, que si habían 12 mil 500 iban a haber 25 mil, porque los privados iban a invertir; no invirtieron. Lo que hicieron fue quedarse con las estaciones de servicio de Pemex, porque había una regulación asimétrica aplicada a la empresa productiva del Estado que nos impidió competir en igualdad de condiciones con las empresas privadas. Nos fueron quitando, sin que nosotros pudiéramos hacer nada.

Las rebanadas del pastel

Ante la creciente amenaza bélica de Estados Unidos y sus gatos de la OTAN en contra de Rusia, el presidente Vladimir Putin cuestiona: somos nosotros quienes estamos colocando misiles cerca de las fronteras de Estados Unidos? ¿Es excesivo exigir que no sean instalados sistemas ofensivos cerca de nuestro hogar? ¿Cómo responderían los estadunidenses si nosotros pusiéramos misiles en las fronteras de Estados Unidos con Canadá o México? Y todavía algunos cándidos aseguran que la guerra fría concluyó con la caída de la Unión Soviética, tres décadas atrás.

Saldos

Juan Carlos Sánchez Magallán

Excelsior

El vocablo latino solidus originó en nuestra lengua la definición actual de la palabra saldo, como “el resultado que se obtiene después de realizar una cuenta.” Así debemos analizar al año 2021, para obtener los saldos negativos y positivos. Para tal fin debemos definir cuáles fueron las adversidades más importantes que afectaron a nuestro país y al mundo.

Cual jinetes del apocalipsis mencionaré las más destacadas: la pandemia de covid-19, el deterioro del medio ambiente y los delitos todos destacando los cibernéticos y las prácticas comerciales que ponen en riesgo la seguridad, la salud y la vida de las personas, como lo son, la venta indiscriminada de armas por parte de las empresas fabricantes de estos artículos bélicos, cuyo único fin es el lucro que ha enlutado a cientos de miles de familias en el globo terráqueo.  Afortunadamente, el canciller Marcelo Ebrard, instaló el tema en el concierto internacional de las naciones al presentar una demanda en las cortes de justicia de Boston, Massachusetts en contra de los fabricantes, y con grandes posibilidades de éxito. Dicho acto logró el reconocimiento y apoyo de la mayoría de los países del globo, incluidos los más desarrollados.

Qué decir de los de los grupos armados ideologizados o delincuenciales que so pretexto de sus ideas “políticas” o del negocio de narcóticos indiscriminadamente asesinan peleando siempre territorios, o la influencia de las culturas apologistas de la guerra y de la supremacía racial que provoca asesinatos múltiples en escuelas, supermercados y lugares públicos de Estados Unidos y diversas latitudes del mundo.

La pandemia ha cobrado casi 6 millones de personas y sólo en México cerca de 300 mil. Con la variante ómicron se incrementarán al cobrar factura a todas aquellas personas que se niegan a ponerse el biológico. Afortunadamente, nuestro país es uno de los cinco mejor vacunados, gracias a la contratación y compra de 244 millones de vacunas a los diferentes países que la producen, entre ellos, Rusia, China, India, Estados Unidos, Europa, etcétera.

Otro de los jinetes apocalípticos son los delitos, destacando los cibernéticos, donde los ciberdelincuentes van adelante de las legislaciones internacionales y de los organismos policiales y de seguridad, creados para detener, combatir y castigar a quienes los practican.

Los malware han puesto en jaque a grandes empresas multinacionales, así como a las instituciones públicas de todos los gobiernos. En general, también han dañado a los usuarios de las tecnologías de la información y comunicación que —justo es mencionar— son las que han permitido el desarrollo de la economía, la educación, la ciencia, la industria, y la cultura de todos los seres humanos.

A manera de ejemplo, menciono el ataque cibernético de ransomware a Colonial Pipeline, una de las empresas petroleras más grandes del mundo, que obligó el cierre temporal de sus oleoductos. En consecuencia, tuvo que pagar a los piratas cibernéticos el rescate de su información secuestrada.

Otro de las amenazas fue el uso y abuso del medio ambiente, donde los hábitos de consumo de todas las personas siguen siendo sus principales enemigos para el cuidado y conservación de los ecosistemas.

De no modificar conductas como el mal confinamiento y destrucción de los desechos sólidos, así como el mal cuidado y conservación del agua, al igual que la sostenibilidad de las ciudades en materia de movilidad, transporte y conservación de energías, se seguirá alimentando el calentamiento global, así como otros problemas medioambientales en detrimento de la comunidad y población internacional.

¿O no, estimado lector?

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