Baluarte Político

Priístas saquearon Campeche

Raúl García Araujo

La “robadera” en Campeche era a lo grande; no solo en cuanto al desvío de recursos públicos o celebración de contratos amañados entre amigos o con empresas fantasmas prestadoras servicios, los cuales nunca se realizaban.

También se practicaba el “lavado de dinero”, a través de los miles de vales de gasolina que mensualmente tiene el gobierno de Pemex, que los dota de de 55 mil litros de combustible al mes, con el propósito de que los vehículos oficiales desarrollan las tareas esenciales.

Camiones de bomberos, ambulancias, patrullas y vehículos con funciones específicas prioritarias, funcionan a partir de ese combustible.

Sin embargo ¿sabe qué hacían con esa gasolina?

Treinta mil litros eran repartidos entre los funcionarios de primer nivel del gobierno, quienes mandaban a sus subalternos, o en el colmo del descaro, ellos mismos, los cambiaban por dinero en ciertas gasolineras.

Parafraseando al presidente Andrés Manuel López Obrador, estos miserables servidores públicos del PRI no tenían llenadera, de ahí sacaban para pagar sus lujos.

Antes de entregar el gobierno y para justificar sus robos, estos funcionarios alteraron el odómetro de los autos oficiales para elevar el kilometraje de los mismos.
Un botón de muestra de lo anterior lo tenemos con la camioneta que usaba el entonces gobernador, Carlos Miguel Aysa González, que siendo modelo 2016 tiene más de 900 mil kilómetros.

En una de esas ni usted, ni yo, y menos el pueblo de Campeche se enteraron que dicho mandatario recorrió 200 veces el país desde Tijuana, Baja California hasta Cancún, Quintana Roo para llegar a ese kilometraje.

Lo ahí sucedido, estimado lector, configura varios delitos, entre otros, fraude, abuso de confianza y abuso de poder.

En esta tesitura es profundamente alentadora la innovadora fuente de información, inaugurada por la gobernadora Layda Sansores San Román denominada “Martes de Jaguar”.

Ésta se ha convertido en un verdadero calvario porque los campechanos no terminan de sorprenderse de cómo los priistas se la pasaban robando las arcas públicas, pero al mismo tiempo el ejercicio es alentador porque queda al descubierto la gavilla de bandidos que tenían secuestrado al estado, de la cual la población decidió liberarse en las pasadas elecciones.

La situación que prevalece en la entidad, con la actual administración es grave; a tan sólo 15 días del cambio de estafeta, el gobierno entrante no tiene un solo peso para emprender ni siquiera alguna acción prioritaria tanto en salud como en seguridad pública, pues se robaron todo, hasta la bodega vaciaron.

Y es precisamente por eso que se negaban a dejar las riendas del gobierno, pues, su objetivo era seguir fregando a los campechanos.

Según datos del INEGI del 2020, en Campeche hay una población de 928 mil 363 habitantes, de los cuales 96 son hombres por cada 100 mujeres, con una edad mediana de 29 años.
Está población es a la que el gobierno de Layda Sansores tiene que atender, y no tiene recursos, porque los priistas secaron las arcas, las exprimieron hasta el último centavo.

La gobernadora Layda Sansores San Román, informó en su programa semanal “Martes de Jaguar” que el gobierno saliente les dijo que había 155 millones de pesos disponibles para diversas acciones, pero jamás le avisó que estos recursos ya estaban etiquetados, al igual que otros 3 mil millones que no se pueden tocar, pues están comprometidos para el pago de proveedores.

La situación es caótica porque urge poner a funcionar un tomógrafo, en la Secretaría de Salud para la atención de pacientes que lo necesitan, pero los distribuidores no lo quieren echar andar porque la pasada administración no les pagó.

En materia de seguridad, es urgente adquirir nuevas patrullas, así como construir instalaciones dignas para los policías estatales, pero, sobre todo, reclutar a nuevos oficiales, pues el estado de fuerza de mil 600 es insuficiente para garantizar la seguridad de la entidad sureña.

Observe la desproporción, tan solo la fuerza policiaca de la Ciudad de México es de 25 mil uniformados, sin contar la Policía Bancaria e Industrial.

Por cierto, la secretaria de Seguridad Pública del estado, Marcela Muñoz, informó que ya aparecieron los 337 policías, a lo que nomás no daban con ellos.

Pues resulta que algunos estaban haciendo labores administrativas y otros fungen como escoltas.

Lo malo de todo esto, es que se la pasaban cuidando a funcionarios y sus familias, desde hace más de 15 años y no son uno o dos los escoltas que tienen, sino hasta seis elementos.

No puede ser, pues que contraten su propia seguridad, ¿A poco no les da vergüenza?

Y en aras de la austeridad, la gobernadora Layda Sansores San Román, anunció la venta del avión con la que cuenta el gobierno del Estado de Campeche, que, según informantes de esta columna, fue utilizado para viajes de placer de ex mandatarios.

De tal suerte que el piloto que estaba al pendiente de la aeronave tendrá que buscar un empleo, pues su plaza de aviador, la va a cancelar la nueva administración.

Desde La Muralla: La gobernadora de Campeche, Layda Sansores San Román y miembros de su gabinete visitaron la semana pasada a los internos del Centro de Readaptación Social (Cereso) de San Francisco Kobén, a quienes les aseguró trato justo. La mandataria corroboró las condiciones en las que viven los reos y se comprometió a impulsar una verdadera reinserción social. Esto ocurrió después de difundir un video durante el “Martes del Jaguar” en que se ve a numerosos custodios patear a dos reclusos, y al final la directora del Cereso, Claudia Góngora Rosado, también participa en la golpiza. El fiscal general de Justicia, Renato Sales Heredia anunció que se abrió una investigación contra la ex servidora y que se tienen identificados a los policías que participaron en la estos hechos. Por cierto, Sales Heredia resolvió el primer caso al frente de esta dependencia. Capturó a un feminicida y logró una sentencia de 80 años contra este sujeto.

Desde El Fuerte: Nos cuentan que el ex candidato de Movimiento Ciudadano, Eliseo Fernández impuso a la alcalde de Campeche, Biby Rabelo, a todo su gabinete que lo acompañó cuando ocupó el mismo puesto hace unos años. ¿Usted se imaginará quién va a tener el control y gobernar en la capital campechana? Se lo dije en pasadas entregas; a la presidenta municipal le falta desligarse de ese personaje para forjar su propia trayectoria política en la entidad. ¿O a lo mejor ni idea tiene de lo que es gobernar?

Contacto: araujogar@yahoo.com.mx
Twitter: @araujogar