Para Usted

Gobierno Cómplice, Gobierno Débil
Mario Gómez y González

chayogomezg@hotmail.com

El gobierno tabasqueño de la Cuarta Transformación (4T/Morena), específicamente el binomio Adán Augusto López Hernández-Carlos Manuel Merino Campos, no pueden, ni deben doblar las manos, ante los actos de corrupción que se dieron con su antecesor inmediato: la administración, también de izquierda, que encabezó Arturo Núñez Jiménez.
No puede ser, el actual, un gobierno cómplice, porque la sociedad tabasqueña se dará cuenta (sino es que ya se dio), que el que rige sus destinos como Estado es un gobierno débil; un gobierno que sucumbe ante la corrupción; ante el desfalco y saqueo de las finanzas públicas, donde se supone que están los recursos para el desarrollo de la entidad y el bienestar de sus habitantes.
Mal mensaje y mala señal con un destinatario directo y específico el pueblo de Tabasco, porque la ausencia de la ley en la entidad, permite que quien debería aplicarla, es el primero en hacerla pedazos y negociarla
No es precisamente, la labor más importante del gobierno local el de ser garante del desarrollo y el bienestar de los tabasqueños, sino que además tiene que ser ejemplo en la aplicación de la ley para quienes, amparados por los cargos públicos administrativos, derivados de un proceso electoral, hacen o hicieron del saqueo, una norma de conducta.
Si el actual gobierno, con toda y su doctrina ideológica del no mentir, no robar y no traicionar, no es capaz de llamar a cuentas a los principales actores que deterioraron el uso correcto de los dineros del pueblo y para el pueblo, no es digno de llamarse gobierno pleno, porque no sirve para nada y debería irse.
Desafortunadamente lo anterior es lo que se está viviendo en Tabasco; lo que los tabasqueños están viendo claramente y sin maquillajes, a propósito del desfalco financiero, reconocido, comprobado y hecho público por el mismísimo Adán Augusto López Hernández, con respecto a la administración de Arturo Núñez Jiménez; la complicidad y la impunidad; donde la autoridad, en vez de castigar a los responsables –sin importar el grupo al que pertenezcan–, los deja hacer y pasar como si nada.
Estamos mal; el gobierno de Carlos Manuel Merino Campos, no puede hacerse de la vista gorda; que no ve, ni oye, que hace cómo que la virgen le habla; esta en juego el Estado de Derecho; su credibilidad y viabilidad; con su actitud valemadrista no puede ni debe, ser protagonista de justificaciones a los delitos cometidos por la pasada administración Nuñista, y salir al paso de los comentarios que se dicen y oyen en todo Tabasco; “en el gobierno son corruptos y nadie va a la cárcel”. Terrible.
Es cierto; de todos es bien sabido que la corrupción es la constante en todos los niveles de gobierno del país (Federal, estatal y Municipal; todos de Morena), pero nunca, jamás podrá legitimarse un acto delincuencial poniendo como ejemplo la impunidad que hay en otros. Se debe exigir, al menos y por lo que toca a los tabasqueños, que se aplique la ley sin excepciones, no avalar que unos la violen porque otros lo hacen.
De hecho, ésta es la peor parte: la ausencia de la aplicación de la ley en Tabasco es tal, que quien debería aplicarla es el primero en romperla y negociarla. De ahí que cuando otros la infringen sea tan sencillo convenir que la impunidad para éstos también se dé, porque se hablan de igual a igual.
¿Los gobiernos de Adán Augusto López Hernández; de Carlos Manuel Merino Campos y el de Arturo Núñez Jiménez, hablan el mismo idioma? ¿son idénticos y parecidos?, ¿están cortados por la misma tijera? ¿Están solapados por el mismo “jefe” ?, ¿son más de lo mismo? “Al tiempo”, diría Juan Carlos Castillejos.

En La Línea de Fuego** Un gobierno cómplice, solapador y protector de los depredadores y saqueadores del presupuesto y los recursos destinados a sacar adelante el desarrollo estatal y el beneficio colectivo, por acción u omisión, es idéntico al que cometió todas estas irregularidades.

En La Línea de Golpeo** Al final, los tabasqueños son y serán quienes pagarán las consecuencias, en razón de que, si no hay sanción a los responsables y el resarcimiento de lo mal dispuesto para beneficio personal, no se podrán superar los rezagos, la pobreza y el atraso, de la entidad y de quienes habitan en su territorio.

Los Malosos** Presente inmediato y futuro comprometido, en materia de superación de los rezagos y atrasos** en el rubro de los mejores trabajos y acciones para que Tabasco prospere, se desarrolle y salga adelante, dejando de cargar la pesada lápida de ser los primeros lugares en todo lo malo y los últimos lugares en todo lo bueno.

Jaque Mate** La sociedad tabasqueña no puede continuar teniendo como norma, ante los entuertos del gobierno morenista de la cuarta transformación, la pasividad y el silencio, pues seguirán siendo tomadas o “terreno fértil”, para que los malos funcionarios, administradores y gobernantes, sigan tan campantes disfrutando lo mal habido, burlándose de la autoridad y del pueblo mismo** en otras palabras, no hay que darles todo, en bandeja de plata; peladito y en la boca** hasta mañana Dios mediante.