Columnas Escritas
El Postigo

La revocación de mandato
Ambrosio Gutiérrez Pérez
La cita del 10 de abril para votar por la revocación de mandato, ejercicio democrático que está ya establecido en la Constitución, ha desatado cualquier cantidad de polémicas y análisis que giran más en torno a la decisión del presidente Andrés Manuel López Obrador de impulsarlo y su confrontación al respecto con el Instituto Nacional Electoral, y menos, muchos menos en la importancia de este nuevo derecho constitucional de los mexicanos para decidir si quieren que quien los gobierna continúe o no en el cargo.
La Ley de Revocación de Mandato se publicó en el Diario Oficial de la Federación el 14 de septiembre del 2021 y entró en vigor al día siguiente. En su artículo segundo dice: Esta Ley es de orden público y de observancia en el ámbito federal en todo el territorio nacional. Tiene por objeto regular y garantizar el ejercicio del derecho político de las ciudadanas y los ciudadanos a solicitar, participar, ser consultados y votar respecto a la revocación del mandato de la persona que resultó electa popularmente como titular de la Presidencia de la República, mediante sufragio universal, libre, secreto, directo, personal e intransferible.
Y el artículo quinto dice: El proceso de revocación de mandato es el instrumento de participación solicitado por la ciudadanía para determinar la conclusión anticipada en el desempeño del cargo de la persona titular de la Presidencia de la República, a partir de la pérdida de la confianza.
Esos dos artículos, el 2 y el 5, de los 60 más transitorios que contiene la Ley Federal de Revocación de Mandato, subrayan el derecho político de los mexicanos de quitar de la Presidencia a quien se eligió pero que ya no resulta de su agrado porque le perdieron la confianza, porque no cumplió con lo que prometió o no llenó sus expectativas.
Con esta Ley, los mexicanos ya no tienen que esperar 6 años para quitarle el poder al presidente en turno que los traicionó porque resultó ser un corrupto, porque sólo benefició a familiares, amigos y compadres, como ocurría en las mejores épocas del conocido PRIAN. A la mitad de sus gobiernos, si hacemos un leve recuento, ya conocíamos la corrupción de Salinas, el beneficio a los más ricos que originó Zedillo, las frivolidades y beneficio económico que dio Fox a sus entenados; las malas decisiones de Calderón y su guerra contra el narcotráfico, la corrupción de García Luna y sus vínculos con el narcotráfico; las frivolidades de Peña Nieto, la casa blanca, los 43 de Ayotzinapa, la enorme corrupción tejida en torno a los otros poderes y la descarada corrupción que hoy tiene en la cárcel a muchos de esa “nueva generación” de priistas.
Esta es la razón profunda del impulso a la Ley Federal de Revocación de Mandato, darle a los mexicanos un instrumento que les permita ejercer su poder, el poder que dimana del pueblo. Es además un elemento que consolida la democracia participativa, por la que tanto hemos luchado las últimas 8 o 10 generaciones en nuestro país.
Los adversarios del presidente López Obrador no están de acuerdo, porque no están ni estarán de acuerdo con nada de lo que haga. Lo hemos repetido muchas veces, lo que les quitó fue precisamente el poder y sus privilegios, las canonjías, el dinero fácil, los negocios al amparo de los cargos públicos (de ahí provienen los ataques de Latinus en su contra, porque le quitó a los Madrazo el negocio de la reventa de medicinas al gobierno), el trafico de influencias y sobre todo la impunidad que tanto ha indignado a los ciudadanos.
López Obrador puede cometer, y ha cometido muchos errores, entre otros ir más allá de su derecho de réplica como ciudadano y enfrascarse en dimes y diretes con algunos periodistas, sin reparar en que es precisamente el propósito de aquéllos: la provocación, tratar de enredarlo, de ensuciar sus actos. No han podido probarle a él, nunca, actos de corrupción, pero tratan de enlodar a sus cercanos…. Y no pararán.
Lo que no pueden quitarle es su vocación democrática. Someterse a la revocación de mandato, con riesgos y todo lo que puedan hacer sus adversarios para que salga mal (incluido el INE), subraya su confianza en que el pueblo de México camina hacia la normalidad democrática y sabrá ya, a estas alturas, discernir lo que le conviene. Desde luego, que debe continuar al frente del gobierno hasta el final en el 2024, y hay que confirmarlo asistiendo a votar.
La pregunta polémica
Además del tema de los recursos para organizar la consulta del próximo 10 de abril, responsabilidad del INE, que causó polémica pues ya sabemos que la autoridad electoral se negaba a proceder argumentando que no contaba con suficiente dinero y, finalmente tuvo que ordenárselo la Suprema Corte, el otro tema de discusión y análisis fue, es, el de la pregunta.
Lo que se preguntará a los mexicanos es: ¿Estás de acuerdo en que Andrés Manuel López Obrador, presidente de los Estados Unidos Mexicanos, se le revoque el mandato por pérdida de confianza o siga en la Presidencia de la República hasta que termine su periodo?
El propio López Obrador cuestionó e ironizó que para responder la pregunta había que poner un traductor. Y sí, es larga e imprecisa y supone dos preguntas en una que puede llevar a la confusión de las personas. De hecho, una primera pregunta es: ¿Estás de acuerdo en que Andrés Manuel López Obrador, presidente de los Estados Unidos Mexicanos se le revoque el mandato por la pérdida de confianza? Y la otra: ¿O siga en la Presidencia de la República hasta que termine su periodo?
De ahí que López Obrador pida a los mexicanos fijarse bien a la hora de responder.
Usted puede responder sí, pero responder sólo sí plantearía una confusión pues, ¿sí quiere usted que se le revoque el mandato, es decir, que lo saquen de la Presidencia por pérdida de confianza como plantea la primera pregunta? O, ¿sí quiere que continúe hasta que termine su periodo?
Ante el hecho consumado de que así será la pregunta y ya no hay manera de cambiarla, si usted está de acuerdo en que continúe al frente del gobierno de México, tendrá que responder con mayor amplitud… algo así como: sí quiero que continúe hasta que termine su periodo. De otro modo, sus adversarios que también estarán en las casillas, son capaces de querer invalidar su voto o hacerlo parecer como un voto en contra aunque usted esté a favor de que termine su periodo.
La campaña de Morena
En todo el país, y en Campeche desde luego, el Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) hace su trabajo. Aquí Erik Reyes, presidente de Morena, encabeza una intensa campaña en favor de la revocación de mandato, de la aprobación del Presidente, más allá de términos especulativos y descalificaciones que provienen de la oposición a Morena, de lo que queda del PRI específicamente, el PAN y empresarios.
Que López Obrador va a ganar la consulta, dicen sus adversarios, y tratan de llevar la discusión al “gasto” en organizarla y a lo “inútil” que resultará porque dan por hecho su derrota como adversarios frente a la popularidad del Presidente y la enorme aprobación que tiene entre los mexicanos, entre el pueblo pues.
Su tema, el de los adversarios al Presidente, es desvirtuar el propósito superior de alentar la democracia participativa y llamar a no ir a las urnas, desalentar la participación y “reprobar” a López Obrador por la eventual baja asistencia de los mexicanos a las urnas.
De ahí el esfuerzo coordinado, intenso, incluyente e inteligente que encabeza Erik Reyes en Campeche. Aquí, como hizo en su momento López Obrador, están teniendo cabida en Morena todos los que de buena fe abracen los grandes fundamentos de la Cuarta Transformación: no robar, no mentir, no traicionar al pueblo.
Rendijas
–Se publicó el decreto que permite promocionar la revocación de mandato, limitado hasta antes del viernes y una responsabilidad del INE que no estaba cumpliendo. Con este decreto la podrán promocionar los servidores públicos, sin que se les sancione perooooo… La noche de este viernes, el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, determinó que aunque el decreto que permite a servidores públicos difundir propaganda está vigente, no es aplicable para la revocación de mandato y para los procesos electorales en marcha. Y da una argumentación que, bueno, ya para qué le seguimos… en conclusión los servidores públicos no podrán promocionar la consulta.
–El frente que abrió el gobierno estatal contra Martha Albores, la dirigenta sindical de la Secretaría de Salud, al evidenciar públicamente sus propiedades y eventual enriquecimiento inexplicable o ilícito, advierte el inicio de un conflicto político-sindical que seguramente escalará. Albores es aliada de Alito, éste la empoderó como nadie más y la Secretaría, casi bajo el mando del Sindicato, fue caja chica para el gobernante en turno.
El tema de fondo es que, en medio del conflicto, queda la Secretaría misma con todas sus vulnerabilidades. Y, seguro también, será el campo de batalla para Albores pues es ahí donde se ha movido, y mueve como pez en el agua. La secretaria Liliana Montejo es una excelente profesional, empática, aplicada, pero nadie puede ganar una guerra sin armas.
–Fue asesinado en Michoacán un periodista más, Armando Linares López del portal Monitor. Fue acribillado en su casa y hasta terminar estas líneas no se tenía claro el motivo. Lamentable desde donde se le quiera ver, independientemente del oficio. Hemos protestado por estas muertes, 7 compañeros periodistas en lo que va del año. Lo que no compartimos es que, de manera muy simplista y hasta criminal, se le quiera echar la culpa al gobierno federal y al mismísimo Presidente.
Los que ejercemos el periodismo sabemos que ha sido, es, desde hace ya muchos años, un oficio con alto riesgo. También sabemos que entre nosotros, como en tantos otros oficios, hay diferencias incluso extremas. Cada quien sabe qué hace y cómo lo hace, y en cualquier caso lo que merece una agresión personal es la condena nuestra y la condena pública.
