Nuevamente, empresarios de la masa y la tortilla se manifestaron en los bajos de Palacio municipal. Insisten en no quedarse callados ante la falta de regulación en la venta clandestina que ejercen los motorrepartidores de tortilla.
Señalan estar conscientes en la necesidad que tiene la gente de trabajar, pero esto debe ser apegado a normatividad y no de manera irregular y anárquica.
Denunciaron que hay una competencia desleal que está provocando el cierre de negocios establecidos, porque el propio ayuntamiento no respeta la ley.