Una vez más, el intento de defensa a Alito Moreno por parte de la bancada priísta provocó álgido debate durante la sesión del Congreso del Estado, que a final de cuentas no concluyó en nada, y solo sirvió para seguir exhibiendo los delitos cometidos por el ex gobernador. Los priistas, incluso, pidieron paz para no seguir exhibiendo a su líder ante la opinión pública.
La bancada del PRI hizo alusión al supuesto desacato de la gobernadora Layda Sansores San Román sobre el amparo a favor de Alejandro Moreno Cárdenas para dejar de difundir sus audios, pero los morenistas mostraron lo tarde que fue entregado tal amparo en Palacio de Gobierno, y pidieron a los tricolores dejar de defender lo indefendible.
Y apenas se calmaban los ánimos, cuando el también amparado Paul Arce usó la tribuna para arremeter contra la bancada de Morena, llamándoles ignorantes, molesto aún por el jalón de orejas a la alcaldesa, quien no ha dado muestra de actividad en su administración municipal, pero la respuesta de los de guinda no se hizo esperar y le recordaron su desaseado paso por la anterior administración y la estela de corrupción dejada a su paso por el ayuntamiento de Campeche.
La situación no pasó a más, y la sesión culminó, citando a los diputados a la próxima sesión el día martes 26 de julio.
