Mensaje de la secretaria de Salud, Liliana Montejo León 

Muy buenas noches.

Gracias por la amabilidad de su atención. 

Hoy me dirijo a ustedes desde la Secretaría de Salud para abordar un tema de alta prioridad que nos compete a todos: la lucha contra el dengue.

Las cifras actuales nos muestran una realidad de alerta. 

A nivel nacional se tienen confirmados más de 18 mil casos en 26 estados; con Quintana Roo y Yucatán concentrando el 39% de los mismos, por lo que es evidente que esta no es una situación aislada. 

En Campeche, nos encontramos en la novena posición a nivel nacional en cuanto a incidencia, con 183 casos confirmados y 3 defunciones en proceso de confirmación. 

En las últimas semanas se han intensificado nuestras actividades y se ha trabajado arduamente en coordinación con dependencias federales, estatales, municipales, fuerzas armadas, sector empresarial y sociedad civil para implementar medidas efectivas, que hasta la fecha han logrado intervenir en 148 mil 700 hogares.

Realizar rociados residuales en 5 mil 300 domicilios.

Nebulizar 17 mil 900 hectáreas.

Ejecutar 56 campañas para eliminar criaderos de mosquitos.

Aplicar tratamientos en 204 escuelas.

Tratar 10 mil 800 áreas comunitarias, incluidos cementerios, unidades de salud, oficinas y mercados.

A pesar de nuestros esfuerzos conjuntos, el dengue sigue siendo una amenaza en nuestra comunidad. 

Las proyecciones indican una curva ascendente de casos y un aumento del nivel de riesgo en las próximas semanas.

El combate al dengue es una responsabilidad compartida, y cada acción individual suma en esta lucha. 

Es imperativo que mantengamos nuestros hogares y espacios comunitarios libres de criaderos de mosquitos, eliminando cualquier acumulación de agua estancada, ya que estos son los principales lugares de reproducción. 

Revise y limpie regularmente recipientes como macetas, baldes, neumáticos viejos y canaletas de lluvia. Mantenga bien tapados los depósitos de agua y trate de aplicar larvicidas si es necesario. 

Pode las hierbas altas y los arbustos cerca de la casa, ya que también pueden ser lugares donde los mosquitos se refugian especialmente en las áreas y colonias ya nebulizadas.

Además de las medidas físicas y químicas de control, el conocimiento es nuestra principal arma. 

Manténganse informados sobre los síntomas del dengue, que incluyen fiebre alta, dolores musculares y, en casos más graves, manifestaciones hemorrágicas. 

¡Nunca nos confiemos!

Debemos vigilar y estar muy atentos con nuestros enfermos durante los 14 días posteriores a iniciada la fiebre, en cualquier momento puede haber señales de alarma como dolor abdominal intenso, fatiga y somnolencia, vómito persistente y sangrado en encías, entre otros, aún cuando la fiebre haya desaparecido.

Si experimentan alguno de estos síntomas, acudan inmediatamente a los servicios médicos y eviten la automedicación.

La labor de cada ciudadano es irremplazable en esta lucha. El compromiso y colaboración son vitales para la efectividad de nuestras estrategias preventivas, que son amplias y adaptadas para cada segmento de nuestra sociedad.

En esta coyuntura, quiero recalcar que la atención médica está garantizada y los medicamentos necesarios están disponibles. Pero la prevención es nuestro primer y mejor escudo.

No podemos hacerlo solos. 

Necesitamos el esfuerzo conjunto de ciudadanos, autoridades y organizaciones para erradicar esta amenaza a nuestra salud pública.

Les pido seguir las recomendaciones de las autoridades sanitarias, a estar bien informados y a tomar todas las medidas preventivas necesarias. 

En la salud colectiva, cada individuo cuenta y su colaboración es crucial.

Recuerda que, si te cuidas tú, nos cuidamos todos; porque en la salud de una comunidad, cada acción importa.

Muchas gracias.