Columnas Escritas
El Postigo
Ambrosio Gutiérrez Pérez
Así es la política: “borrón y cuenta nueva”
En los más recientes Martes del Jaguar de la gobernadora Sansores, fiel a su estilo, había venido denunciando la traición, la corrupción también, la interna y en el Ayuntamiento de Campeche. La que se ha descubierto de Eliseo N, el ex alcalde prófugo, y varios de sus funcionarios; y la que se ha descubierto ahora, ya en la administración de la Biby alcaldesa y por lo cual hay denuncias y abiertas varias carpetas de investigación.
La confrontación pública, de la Gobernadora señalando la corrupción, las factureras descubiertas a través de las cuales Eliseo N y la propia Biby alcaldesa desviaron y le robaron recursos al Ayuntamiento y ésta quejándose de persecución política, tomó tintes nunca antes vistos pues ya sabemos que el ex alcalde Eliseo N está prófugo de la justicia y Juan Carlos Lavalle estuvo en prisión preventiva.
De pronto, cuando ya se había revelado que hay más carpetas de investigación y varios funcionarios municipales andan con amparo bajo el brazo por temor a ser aprehendidos, la Biby alcaldesa buscó el diálogo (que ella misma había suspendido para asumir una actitud de absoluta confrontación, contestataria, retadora y grosera) con la Gobernadora y lo encontró.
Y la confrontación quedó en punto muerto. La gobernadora Sansores reveló el diálogo, los acuerdos para apoyar al Ayuntamiento a bachear (inició este sábado), a restaurar y alumbrar la ciudad e incluso habló sobre su desacuerdo (que ha expresado desde mucho antes de ser gobernadora) con la prisión preventiva en la que estaba Lavalle y la decisión de una jueza de que siga su juicio en libertad (argumentando legalmente estar enfermo).
Desde luego que el “sospechosismo” ganó terreno. ¡Aaaah, exclamó la comentocracia “alitosa”, ya negociaron quién sabe qué y se acabó la corrupción por decreto! ¿Y las carpetas de investigación? ¿Y las factureras? ¿Y el dinero desviado?
Las dudas, o certezas en caso de los “alitosos”, provienen de una frase que dijo la Gobernadora de buena fe, subrayando que si hubo desacuerdos y ofensas ya quedaron atrás: “borrón y cuenta nueva”. Claro, alguien tiene que explicar hasta dónde el borrón y dónde empezará la cuenta nueva… los ciudadanos lo merecen, la Cuarta Transformación lo necesita.
Y lo dejó claro
La propia Gobernadora, entrevistada sobre el acuerdo con la Biby alcaldesa, fue muy clara: el acuerdo es de trabajo, para rescatar la ciudad de baches (se van a pavimentar unos 30 mil metros de calles), se apoyará en jardinería y en alumbrado público. Aaah, pero arreglos en los oscurito para salvar a ex funcionarios y actuales funcionarios municipales de delitos por corrupción, ¡no!
Y no tenemos por qué dudarlo. Layda Sansores tiene compromiso público desde su campaña; lo ha reiterado como gobernante y lo ha subrayado varias veces: va derecho contra los corruptos que saquearon a Campeche. Y cuando el compromiso es así, lo menos que podemos darle es el beneficio de la duda. Veremos cuándo y hasta dónde.
Nadie es nadie…
Cuando el presidente Andrés Manuel López Obrador tomó la decisión de acudir todas las mañanas a una conferencia de prensa conocida ahora, y mundialmente, como “la mañanera” sus motivos estaban plenamente justificados y de muchas maneras lo siguen estando, aunque la sobreexposición lo ha llevado con frecuencia a la imprecisión de “los otros datos”.
En el ejercicio periodístico sabemos que la información es fundamental, es la materia prima porque de ahí deriva la nota y todos los demás géneros periodísticos conocidos hasta ahora. “La mañanera” es por ello un cúmulo de información, buena y mala. Y por eso, los medios de comunicación, los periodistas y la comentocracia en pleno, deben estar agradecidos.
Nunca antes ningún presidente de México había hecho un ejercicio de esta naturaleza. Los presidentes informaban lo que querían, cuando querían y a quien querían, pues sus controles a través del dinero y la publicidad eran efectivísimos. Nadie protestaba, aunque nadie obtenía información.
Para el presidente López Obrador el ejercicio era necesario. Ante la adversidad desatada por la mayoría de esos medios, de periodistas y comentócratas, a quienes les quitó dinero y privilegios, debía marcar (como lo hace aún) la agenda del día, decir su verdad y defenderse de ataques. No siempre le sale bien y más que marcar una agenda que lo beneficie, a veces marca una agenda que lo daña y daña a su gobierno.
El fenómeno, claro, es que pese a las muchas adversidades generadas desde su propio gobierno por quienes deberían arroparlo, desde los medios y periodistas que quieren que se vaya para que regrese el dinero y sus privilegios, su aprobación sigue siendo muy alta. Es, en efecto, un “animal político” con virtudes y con anclas que no le han podido mover frente al pueblo mayoritario que lo eligió.
Lo único malo es que su gobierno terminará y, desde luego, no hay nadie más que se le compare. Nadie es nadie.
Las ejecuciones
Todavía circulaba en redes sociales los pésames, y también los reclamos de justicia, por el asesinato del político Manuel Peña, cuando este viernes nos volvió a sorprender y no puso en vilo otra ejecución, la de un hombre que luego supimos su identidad, ahí por el cruce de las avenidas Central y Colosio.
Los curiosos primero, los propios policías (en una foto se observa claramente a una oficial grabando el llanto desesperado de la mujer que acompañaba al ejecutado) y los medios de comunicación, subieron videos y fotos que nos mostraron la escena del crimen aún caliente, con todo su drama.
Muy rápido, sin información oficial, empezaron las especulaciones, la echadera de culpas (a las autoridades estatales desde luego, a la Gobernadora, al Fiscal). Fue claro que los adversarios políticos de Layda Sansores se montaron (sin saber nada más que el hecho lamentable) en una serie de especulaciones, de exageraciones y catastrofismos, y casi casi le pusieron en las manos al fiscal Renato Sales, y a la secretaria de Seguridad Pública, Marcela Muñoz, el arma asesina.
El fiscal Sales, sin embargo, hizo lo correcto. A las pocas horas salió a hacer una declaración en sus propias redes sociales. Se trataba de un sujeto identificado como José de Jesús N (Arambul), apodado “El Chikis”, que había sido candidato de Movimento Ciudadano en un municipio de Nayarit, con orden de aprehensión en Tépic de este mismo año. Venía huyendo, dijo el Fiscal, estuvo en Mérida, Cancún y Campeche. Confirmó que fueron dos los sicarios.
Pese a la información oportuna, en las mismas horas subieron a redes una información sobre la “ejecución” del mismo sujeto, “El Chikis”, en febrero pasado en Ixtlán del Río, Nayarit, por supuesto involucramiento en asuntos de cárteles del narco. Bueno, ¿cómo estaba? Hay que decir que en un primer momento sorprendió a muchos. ¿Mentía el Fiscal de Campeche? Sin embargo se aclaró que la propia Fiscalía de Nayarit había desmentido que hubiese sido asesinado “El Chikis” junto con un militar que lo acompañaba.
Entonces, aclarado el asunto, la comentocracia en pleno se fue por otros rumbos… ¡Aaaah, pero cómo es que los sicarios sí encontraron al sujeto con orden de aprehensión y las policías campechanas no! ¡Pobre Campeche, hay ejecuciones a cada rato! Y, por si fuera poco, empezaron a circular supuestas amenazas de cárteles de la droga contra la ciudadanía, que ejecutarían a quien anduviera en las calles después de las 11 de la noche… exageraciones, mentiras, mala fe y ánimo chingativo.
Sí, las policías deben actuar. Sí, las autoridades deben investigar, hacer inteligencia, prevenir delitos. Sí, las autoridades deben informar con oportunidad a la ciudadanía (hasta este fin de semana no sabíamos nada del asesinato de Manuel Peña) para atajar la especulación. Sí, y se hace, nada comparado con el catastrofismo, sobre todo en las redes sociales, y claro, en los medios de Alito y sus aliados.
Se ha informado a la ciudadanía, se ha revelado que antes de la actual administración los delitos se ocultaban y así se ocupaba primeros lugares, pero se siguen ocupando aunque ahora sí se reportan al Comisionado Nacional de Seguridad Pública.
Seguimos viviendo en términos generales en una entidad tranquila aunque, aunque eso sí, cruzada por la maledicencia, la mala fe e incluso la mentira descarada de quienes, desde sus pequeños feudos, todavía no perdonan (ni perdonarán) que les hayan quitado el poder con todo lo que para ellos significaba: dinero y privilegios.
Rendijas
–El viernes pasado la dirigencia de morena se trasladó a Calkiní y Dzitbalché encabezada por su presidente Erick Reyes, para hacer equipo con los morenistas de estos municipios, para informarles de las acciones en campo del propio partido (más territorio menos escritorio) y de las acciones de los gobiernos federal y estatal de la 4T. Lo interesante es que, la estrategia, sí está ganando territorio ante la inacción de la oposición atomizada, desprestigiada y con los mismos que harán, o están haciendo lo mismo.
–Los reclamos al interior del PRI, de los que todo el tiempo han servido y nunca han obtenido posiciones, amenaza con una nueva desbandada. Si cuanto tenían todo para repartir no lo hicieron, ahora que queda prácticamente nada no es creíble que vayan a hacerlo. Así que expresiones como la de Manuel Solís y Candelaria Cajún, reclamos justos, se secarán de nuevo en el desierto priista.